En 2018, una demanda colectiva de accionistas desembocó en un acuerdo de 2.950 millones de USD entre los accionistas y la petrolera brasileña de titularidad estatal Petrobras. El impacto en la reputación de la empresa se tradujo en un drástico descenso del precio de las acciones, que cayeron a 3 USD en 2016 frente a un máximo anterior que había llegado a estar en 72 USD en 2008.
En la demanda colectiva de accionistas se alegaba que los inversores habían sufrido grandes pérdidas debido a declaraciones falsas en los documentos presentados por la empresa ante la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC). La cuantía total del acuerdo superó las multas totales de 853,2 millones de USD impuestas a la empresa por las autoridades estadounidenses y brasileñas. Este caso ilustra claramente que los costes de estas demandas colectivas de accionistas pueden ser muy significativos.
Fuente: The Rise of Shareholder Class Actions in Response to Corporate Misconduct — GAN Integrity blog